A pesar de que los científicos han estado observando el incesante ruido radioeléctrico de nuestro planeta durante mucho tiempo, a finales de febrero pudieron escucharlo por primera vez desde la Luna.. Crédito de la imagen: Pixbay
Jack Burns, un astrofísico de la Universidad de Colorado en Boulder, describió esto como el «inicio de la radioastronomía desde la Luna».
Las tecnologías humanas, como los teléfonos móviles y las torres de radiodifusión, emiten constantemente ondas de radio al espacio, y los astrónomos calculan que esta firma delatora de la humanidad ha recorrido 75 sistemas estelares cercanos. Esto sugiere que la Tierra alberga una especie tecnológicamente avanzada que puede estar siendo vigilada por alguna civilización extraterrestre.
A pesar de que los científicos han estado observando el incesante ruido radioeléctrico de nuestro planeta durante mucho tiempo, a finales de febrero pudieron escucharlo por primera vez desde la Luna.
El 22 de febrero, la nave espacial Odysseus, el primer vehículo comercial que aterrizó con éxito en la Luna, tenía un pequeño radiotelescopio que grabó ondas de radio emitidas desde la Tierra durante 1 hora y media. El experimento llamado ROLSES realizó sus observaciones desde el punto de aterrizaje de Ulises, cerca del cráter Malapert A, a unas 185 millas (297 kilómetros) del polo sur de la Luna.
Jack Burns, un astrofísico de la Universidad de Colorado que colabora con ROLSES, caracterizó el evento como «el nacimiento de la radioastronomía desde la Luna». Los astrónomos esperan buscar huellas dactilares similares de planetas alrededor de otras estrellas, lo que sería un signo potencial de vida inteligente al estudiar la Tierra como un exoplaneta.
Burns dijo: «Eso es la Tierra», en su intervención en la 244a reunión de la Sociedad Astronómica Americana en Wisconsin el lunes 10 de junio. En la imagen en pantalla, había pequeños puntos blancos esparcidos sobre un fondo negro azabache, la mayoría formando líneas horizontales.
Las cuatro antenas del experimento ROLSES registraron señales de radio de transmisores terrestres como motas blancas. Burns agregó que, en términos de observación de la Tierra en longitudes de onda de radio, se trata de «una selfie de frecuencias” muy bueno de la Tierra […] que no tiene parangón hasta la fecha».
Según Tim Crain, cofundador y director técnico de Intuitive Machines, durante su histórico aterrizaje el 22 de febrero, la nave Odysseus, de 4,3 metros de largo, descendió más rápido de lo previsto y se volcó, probablemente debido al quiebre de una o dos de las patas de aterrizaje al chocar contra un trozo de suelo lunar. Como resultado de esta orientación imprevista, las antenas de la nave espacial no apuntaban hacia la Tierra, lo que disminuyó significativamente la velocidad a la que se podían enviar los datos.
REFERENCIAS
Past, present and future stars that can see Earth as a transiting exoplanet. L. Kaltenegger. J. K. Faherty. Nature: https://www.nature.com/articles/s41586-021-03596-y
